miércoles, agosto 25

Vida de perros

Hace tiempo que vengo dándole vueltas a una idea que ayer termino de definirse: quiero un perro *chochero*
He dicho!
Lo admito.. y qué?
Yo, que siempre reprimí mis instintos asesinos para con esos perros/rata que llevan las viejas de clases acomodadas ahora resulta que quiero uno.
Quiero ir con él bajo el brazo a todos lados (incluida la consulta del médico) y que la gente no nos imagine al uno sin el otro.
Consentirlo y retarlo como si fuera un nene.
Hablarle como si de un amigo más se tratara.
Eso si! Todavía no renuncio a mi convicción de que los perros no deben ir vestidos, así que mi can no llevaría un “jerseisito” en invierno.

Tampoco renuncio al (poco) sentido común que me queda y sé que tener un pichicho, estando todo el día fuera de casa y viviendo en un piso/ depto. seria bastante irresponsable de mi parte, asi que postergo mi necesidad *mascoteril* para cuando viva en una casa con patio y pueda, entonces adoptar al labrador dorado de mis sueños.

This page is powered by Blogger. Isn't yours?